domingo, 28 de junio de 2015

WALLAP!!! PICKING, PRUNNING Y PACKING.

Nyah sera sinónimo para mi de naranjas, porque fue aquí donde conseguimos de nuevo trabajo, esta vez cogiendo naranjas, limones y pomelos. De nuevo un contratista nos ofrecía la oportunidad de trabajar. Pero esta vez , y seré sincero, tuvimos que hacernos pasar por franceses con visa de trabajo, una pequeña triquiñuela con la que buscarnos la vida en estos lares, que dio resultado durante 6 semanas.
Durante esas seis semanas cogimos naranjas, limones y pomelos en diferentes plantaciones de la comarca y además yo me busque las "habichuelas" en los días que no había recogida de fruta para ir a podar frutales o incluso acabar en una fábrica de empaquetado de naranjas gestionada por chinos y que resultó ser mi último "currele" en esta zona.
Por tanto, el Picking(coger la fruta),el Prunning(poda) y el Packing(empaquetar) supusieron para mi y mis amigos el irónico sueño australiano de la ¡TRIPLE P!, el sueño de poder trabajar en cualquiera de las "P" y seguir ahorrando dinero para proseguir nuestros viajes.
Aquí disfruté mucho del Picking junto a Marta, Julien, Antoine, Azzurra, Elia, Joan, Alan, Thomas, Phil y mis queridos Kiebrab y Kuki. Fueron días duros, de llenar de nuevo cajones y cajones de las dichosas naranjas, pero productivos en cuanto a anécdotas y buenos momentos, de trabajos en equipo que dieron su recompensa, aunque las naranjas estuvieran mucho peor pagadas que las peras o manzanas. 
También disfrute de las largas jornadas de poda, junto a Antoine, Alan , Elia o Thomas (e incluso la media hora con Joan ;)), que no, nos dieron mucho dinero, pero que nos dieron la oportunidad de innumerables horas de charlas.
Y acabe también disfrutando "como un chino" el trabajo en el Packing, junto a Alan, Antoine, Phil, Azzurra, Elia y el gran Joan, donde el empaquetado de las naranjas nos regalo risas, a "posteriori", cuando las duras jornadas acababan y nos dábamos cuenta del cansancio que teníamos encima, o de ver que nuestros compañeros chinos no se quejaban de nada. Jamas olvidare a Joan haciendo cajas o a mi metiendo naranjas en cajas como un robot mientras las risas se mezclaban con pensamientos tales ¿que coño hago yo aquí?.
6 semanas de color naranja, de amigos, de picking, paking y prunning que jamas olvidare. Me llevo conmigo un saco lleno de emociones y experiencias, me llevo el sabor de las naranjas comidas en las pausas, me llevo la felicidad de haber trabajado con el mejor equipo del mundo y me llevo también unas cuantas divisas de esfuerzo, que a bien seguro me otorgarán futuras aventuras.
Y me llevo una palabra hermosa ¡¡¡WALLAP!!!!!( Grito de animo de los etíopes cuando cogen la fruta), una palabra que me ha acompañado por mas de 4 meses, y que ha sido la fuerza motriz de las largas jornadas, una palabra de animo que ha despertado risas y carcajadas. Gritarla al cielo mientras cogía fruta fue muchas veces necesidad y alegría, porque después la gritaría algún otro compañero, y otro y otro y otro....
Echaré de menos todos esos buenos momentos vividos junto a los compañeros y amigos, la sensación de coger las frutas, de llenar las sacas o de llenar los cajones.
Ha sido una de las experiencias de trabajo mas bonitas de mi periplo, pero es tiempo de continuar el viaje.
¡QUE NO PARE EL PICKING, EL PRUNNING Y EL PACKING!! ¡VIVA LA TRIPLE P! WALLAP!










courtesy of Joan
courtesy of Joan
courtesy of Joan
courtesy of Joan
courtesy of Joan
courtesy of Joan
courtesy of Joan
courtesy of Joan
courtesy of Elia
courtesy of Elia
courtesy of Elia
courtesy of Julien
courtesy of Julien
courtesy of Julien
courtesy of Julien
courtesy of Julien
courtesy of Julien
courtesy of Julien
courtesy of Joan
courtesy of Joan

And yeah..then there was the triple P: picking, packing and pruning:) Well ok, at least for Hector, as I only did the first of the three. What else is there to say? It was cool, I'm glad it's over:)

No i oczywiście ten mały szczegół: w międzyczasie trochę pracowaliśmy:) Było miło, ale dobrze, że już się skończyło:)

NYAH, NUESTRA VIDA EN UNA CARAVANA.

Finalmente, tuvimos la suerte de encontrar "tajo" recogiendo cítricos. Y tuvimos que mudarnos a un lugar llamado Nyah, situado en ninguna parte, y cuando digo en ninguna parte , me refiero a que allí la "civilización" era un caravan park y una pequeña calle de unos 200 metros con algunas casas y comercios.
Pero el lugar nos ofreció la oportunidad de vivir 6 semanas en una caravana, junto a Julien y Antoine al principio y mas tarde junto a Joan. Fue una divertida y apasionante experiencia la de vivir en esta caravana, fría por las noches y de colores descafeinados por las mañanas, pero que finalmente nos regalo tantas anécdotas y buenos momentos que la echare bastante de menos.
Aquí en este lugar , Nyah "paradise" ,disfrutamos de la brutal experiencia de convivir con innumerables personas que a día de hoy son mas que amigos, y que convirtieron aquel frío lugar en un lugar entrañable, en el que cada tarde después de trabajar compartiríamos cenas, juegos y charlas.
Este Caravan Park, tan multicultural como perdido del mundo, me ofreció el abrazo de indios, malayos, indonesios, chinos, alemanas, italianos, franceses, eritreos, sudaneses, etiopíes, australianos y hasta de un catalán, y que convirtieron mi despedida en una dura experiencia vital, al dejar atrás tan solidario lugar. Aquí todos nos ayudábamos en la búsqueda de trabajos, y convertimos nuestra clandestinidad en lazos eternos de amistad, el trabajo de unos era la felicidad de todos.
Nyah sin pretenderlo, volvió a ensanchar mi alma y mi corazón, porque aquí encontré tantos amigos que un pedazito de mi se rompió al partir.....pero no debo dramatizar, soy feliz de cada día pasado en ese lugar, entre la caravana, la sala de juegos, la cocina o las caravanas de los compañeros, soy feliz de haber podido compartir la complejidad que a veces supone buscar trabajo cuando estas marcado como "ilegal", soy feliz de haber estado allí y jamas olvidare nada ni a nadie de este lugar.
Este lugar también fue sinónimo de despedidas, aquí tuvimos que decir " a Bientôt" a Julien y Antoine con los que habíamos pasado la friolera de 3 y 5 meses juntos y aquí también tuvimos que despedirnos de nuestra etapa de trabajo en Australia.
Pero en contra posición encontré grandes amistades, como Elia, Azzurra, Alan, Thomas, Nouk, Go, Phil o mi querido y loco Joan que me permitieron tener una sonrisa perenne en todo momento.
OS QUIERO A TODOS! OS ECHARE DE MENOS ETERNAMENTE, PERO A MUCHOS DE VOSOTROS OS ENCONTRARE EN ALGÚN LUGAR DEL PLANETA MAS PRONTO QUE TARDE.































pic by Julien
pic by Joan
We obviously hadn't had enough adventures with the australian fruit. We decided to go to the Swan Hill region for about a month for the orange season. We stayed in a caravan park in the middle of nowhere in the town of Nyah. We shared the caravan with Julien and Antoine, and when they left- the spanish Joan joined us. 
Even though it was cold (grrr...the australian winter), we enjoyed this melting pot of different nationalities: sri lankan, indian, malaysian, indonesian, german, italian, french, spanish, afghani, australian, ethiopian, erythrean, sudanese..... you name it:) At lunch and dinner time the different smells took over the kitchens, watering our mouths for the exotic spices and dishes. We would then make big feasts with food from around the world and stories from all the corners of the world! We went for walks along the Murray river, that was only a few minutes away. But most of all we made new wonderfull friends and amazing memories!!!

Wygląda na to, że zbiory owoców weszły nam w krew... ponieważ pomarańczy jeszcze nie zbieraliśmy, a akurat zaczynał się sezon, postanowiliśmy przedłużyć naszą owocową przygodę o kilka tygodni w okolicach Swan Hill. 
Zamieszkaliśmy w wiosce Nyah, dzieląc karawanę z Julienem i Antoinem, a po ich wyjeździe, przez kilka ostatnich dni w okolicy z hiszpanem Joanem.
Kamping był naprawdę międzynarodowym miejscem, pełnym backpackerów i sezonowych pracowników. Międzynarodową nutkę czuć było przede wszystkim w porze obiadu i kolacji, kiedy zapach różnorodnych, egzotycznych potraw i aromatycznych przypraw królował nad kampingowymi kuchniami. A po gotowaniu przychodził czas na degustację pośród Hindusów, Malezyjczyków, Niemców, Włochów, Indonezyjczyków, Etiopczyków, Francuzów etc. Codzienne uczty były okazją na wymianę ciekawych historii z różnych stron świata. 
Aby spalić kalorie graliśmy wieczorami w pingponga a dla świeżości umysłu dzień kończyliśmy partyjką szachów. Każdy słoneczny dzień był natomiast okazją na spacery wzdłuż pobliskiej rzeki Murray.